Haz tus propios comestibles: divertidas y fáciles golosinas cannábicas DIY
"Preparar tus propios comestibles de cannabis en casa es una forma divertida y creativa de disfrutar de los beneficios del cannabis. Usted controla la dosis, elige los ingredientes y crea deliciosos manjares a su gusto. Aquí tienes una guía fácil para empezar"
¿Por qué hacer tus propios comestibles?
Hacer tus propios comestibles te permite personalizar todo, desde el sabor hasta la potencia. Puedes seleccionar ingredientes más sanos, adaptarlos a dietas específicas (como la vegana o la sin gluten) y ahorrar dinero evitando los comestibles comprados en la tienda. Además, es divertido experimentar y crear tus propios aperitivos de cannabis.
Paso 1: Descarboxilación (activación del cannabis)
Antes de hacer comestibles, necesitas "activar" el THC o CBD de tu cannabis. Este proceso se llama descarboxilación, y es sencillo:
- Precaliente su horno a 240 °F (ca. 116 °C).
- Dividir el cannabis en trozos pequeños y repartirlo uniformemente en una bandeja para hornear.
- Hornear durante 30-40 minutos, removiendo de vez en cuando.
- Una vez que adquiere un color dorado, está listo para ser utilizado en sus recetas.
Paso 2: Hacer cannabutter o aceite de cannabis
La mayoría de los comestibles comienzan con cannabutter o aceite de cannabis. Son grasas que absorben el THC o el CBD, haciendo que tus comestibles sean potentes y eficaces.
Cómo hacer cannabutter:
- Fundir 1 taza (0.24 l) de mantequilla en un cazo a fuego lento.
- Añadir 1 taza (0.24 l) de agua y 7-10 gramos de cannabis descarboxilado.
- Cocer a fuego lento durante 2-3 horas, removiendo de vez en cuando (no dejar que hierva).
- Cuele la mezcla con una estopilla para eliminar la materia vegetal.
- ¡Refrigere la mantequilla y utilícela en sus recetas!
Cómo hacer aceite de cannabis:
- Combine 1 taza (0.24 l) de aceite de coco o de oliva con 7-10 gramos de cannabis descarboxilado en una olla de cocción lenta o una cacerola.
- Calentar a fuego lento durante 2-4 horas, removiendo de vez en cuando.
- Cuele a través de una estopilla, y su aceite estará listo para cocinar.
Paso 3: Elige tu receta comestible
Una vez tengas tu cannabutter o aceite de cannabis, podrás utilizarlo en todo tipo de recetas. Tanto si prefieres aperitivos dulces como salados, aquí tienes algunas ideas fáciles:
- Brownies de cannabis: Simplemente sustituye la mantequilla normal por cannabutter en cualquier receta de brownies.
- Galletas: Haz galletas de chocolate o galletas de azúcar con tu mantequilla infusionada.
- Palomitas de maíz: Rocía aceite de cannabis sobre palomitas recién hechas para un aperitivo rápido.
- Aderezo para ensaladas: Utiliza aceite de cannabis en tu receta favorita de aliño para ensaladas.
Paso 4: Dosificar tus comestibles
Conseguir la dosis correcta es importante con los comestibles porque los efectos tardan más en aparecer y pueden ser más fuertes. He aquí una forma sencilla de calcularlo:
- Conoce la potencia de tu cannabis (por ejemplo, si tiene un 20% de THC, 1 gramo tiene 200 mg de THC).
- Si has utilizado 7 gramos de cannabis en tu mantequilla o aceite, multiplícalo por la cantidad de THC (7 gramos × 200 mg = 1400 mg de THC en total).
- Divide por el número de raciones (si haces 20 brownies, son 70 mg de THC por brownie).
Comience siempre con una dosis baja (5-10 mg por ración) y espere al menos 2 horas antes de ingerir más para evitar un consumo excesivo.
¡Diviértete y experimenta!
Hacer comestibles es una forma estupenda de experimentar en la cocina. Pruebe diferentes recetas, juegue con los sabores y ajuste la potencia a su gusto. Tanto si prepara brownies, galletas o platos salados, el proceso es sencillo y gratificante.
Hacer comestibles de cannabis en casa es fácil y te da un control total sobre la dosis y los ingredientes. Siguiendo esta sencilla guía, podrás crear deliciosos y eficaces comestibles que se adapten a tus gustos. Sólo recuerda empezar con pequeñas dosis, ser paciente y disfrutar.